Entre otras cosas la ley se aplicará en la contratación de bienes y servicios, el suministro de información a través de la Red, la organización de subastas, el envío de comunicaciones comerciales y en otros servicios solicitados por los usuarios que representen una actividad económica.
A pesar de que esta norma afectará a numerosas empresas, la gran mayoría desconocen qué obligaciones les impondrá la nueva legislación. Aspectos como el ámbito de aplicación de la ley que no está claramente delimitado o la falta de regulación de las infracciones que realicen los empleados en horario laboral, pueden conducir a situaciones de inseguridad jurídica.

Entre otras obligaciones la ley exige incluir en la páginas web información completa sobre la empresa oferente de servicios o bienes, CIF, correo electrónico, Registro público en el que se encuentre inscrita, información clara y exacta sobre el precio de los productos o servicios, indicando si incluye o no los impuestos o si en su caso incluye gastos de envío.