Número 202 - 1ª Quincena Abril de 2001.

Función del auditor interno en relación con el auditor externo
La principal diferencia entre auditoría interna y auditoría externa, extriba en que la auditoría interna se lleva a cabo por personas pertenecientes a la propia plantilla de la empresa; la auditoría externa tiene que ser efectuada por personas totalmente independientes de la empresa. El presente artículo ha sido realizado por Francisco M. Blay Alabarta y en él se refleja una síntesis de su exposición en la reunión de la Comisión de Auditoría del Colegio del pasado 12 de marzo.

Introducción
Al principio la finalidad de la función auditora era simplemente revisar la situación económico-financiera de la empresa, buscando posibles fraudes o errores y asegurando la aplicación correcta de las normas contables.
El auditor interno actuaba en lo que hemos llegado a conocer como censor de cuentas. Sin embargo, la mayor dimensión y complejidad de las empresas, llevó a crear en 1941 en Nueva York el Instituto de Auditores Internos (IIA).

Sus funciones son las siguientes :

  • formación profesional de los auditores internos.
  • perfilar y desarrollar la función de auditoría interna.
  • elaboración de las normas y reglas que aseguren la correcta práctica de dicha función, con las debidas garantías de eficacia y ética.
El concepto actual de auditoría interna se define como una función de dirección cuya finalidad es analizar y apreciar, con vistas a las eventuales acciones correctivas, el control interno de las empresas para garantizar la integridad de su patrimonio, la veracidad de su información y el mantenimiento de la eficacia de sus sistemas de gestión.
Una definición resumida sería la del auditor interno como vigilante del cumplimiento del control interno de la empresa.
Sin embargo, en reunión de junio de 1999, el IIA aprobó una nueva definición de auditoría interna: La auditoría interna es una actividad independiente y objetiva de aseguramiento y consulta, concebida para añadir valor y mejorar las operaciones de una organización. Ayuda a una organización a cumplir sus objetivos aportando un enfoque sistemático y disciplinado para evaluar y mejorar la efectividad de los procesos de gestión de riesgos, control y dirección.
En esta definición subyacen las siguientes premisas:

1. La auditoría interna se definirá por lo bien  que sus servicios se han desempeñado, más que por quién 
    los desempeña o cuáles son.
2. Para continuar viable, la auditoría interna necesita ser percibida como una profesión que añade valor a las 
    organizaciones.
3. Los auditores internos deben adoptar la perspectiva de una cadena de valor completa.
4. La estructura conceptual de la auditoría interna debe ir más allá de sus procesos inherentes propios para reflejar la 
    dirección de servicios organizacionales.
5. Las normas y otras orientaciones profesionales no sólo deben guiar a la profesión sino que también deben 
    simbolizar una calidad distintiva para el mercado.

En un sentido fundamental, el concepto actividad de seguridad y consulta converge en un cambio paradigmático hacia una orientación más proactiva centrada o enfocada  hacia el cliente. La fuerza de cambios similares ha reestructurado todas las industrias y parece también destinada a la profesión de auditoría interna. Si los servicios de auditoría no satisfacen las necesidades de clientes, simplemente serán comprados a otros suministradores”.

Diferencias entre auditoría interna y externa
La auditoría externa en su definición más tradicional, sería el servicio público prestado por profesionales cualificados en contabilidad, consistente en la revisión  de los estados financieros de una empresa, según normas y técnicas específicas, a fin de expresar su opinión independiente sobre si tales estados presentan adecuadamente la situación económico-financiera de dicha empresa en un momento dado, sus resultados y los cambios en ella habidos durante un período determinado, de acuerdo con los principios contables, generalmente aceptados.

La auditoría interna se lleva a cabo por personas pertenecientes a la propia plantilla de la empresa. La auditoría externa tiene que ser efectuada por personas totalmente independientes de la empresa.

El objetivo de la auditoría externa es expresar una opinión sobre los estados financieros de la empresa auditada, mientras que los objetivos de la auditoría interna son múltiples y abarcan todo el campo de operaciones y actividades de la empresa.

La realización de los trabajos de auditoría externa se desarrollan de acuerdo con normas y procedimientos internacionalmente homologados que no suelen ser substancialmente alterados ni modificados y los de auditoría interna suelen ser más flexibles y menos normativizados.

Función del auditor interno en relación con el auditor externo. Normativa del IIA.
Una vez definida la función del auditor interno y las diferencias entre auditoría externa e interna, parece necesario pasar a enumerar cuales son los puntos en común de ambas profesiones, o definir cuales son los puntos de contacto o cruce entre ellas.

La normativa emanada del Instituto de Auditores internos, contempla en su punto 550 Auditores Externos, la relación del auditor interno con el auditor externo y define los campos de actuación de ambos. Los puntos contemplados son los siguientes: 

I. El trabajo de auditoría externa e interna debe ser coordinado para asegurar una cobertura adecuada de  auditoría y para minimizar la duplicidad de esfuerzos.
   1.  El alcance del trabajo de auditoría interna abarca objetivos y actividades tanto financieras como  operacionales. 
        Dicho alcance está cubierto por la Norma 300. Por otra parte, el examen ordinario  de los auditores externos 
        está encaminado a obtener evidencia suficiente que soporte una opinión  sobre la fiabilidad global de los 
        estados financieros anuales. El alcance de su trabajo está determinado por sus normas profesionales y ellos 
        son los  responsables de juzgar la adecuación de los procedimientos aplicados y la evidencia obtenida con el 
        objetivo de expresar su opinión sobre los estados financieros anuales.
   2.  La supervisión del trabajo de los auditores externos, incluida la coordinación con los auditores internos es 
        responsabilidad, generalmente, del Consejo. La coordinación de hecho debe ser responsabilidad del director de 
        auditoría interna quien requerirá el apoyo del Consejo para alcanzar una coordinación efectiva del trabajo de 
        auditoría.
   3.  Al coordinar el trabajo de los auditores internos con el de los externos el director de Auditoría interna debe 
        asegurar que el trabajo de los auditores internos se realiza de acuerdo con la Norma 300 y  no se duplica el 
        trabajo de los auditores externos, que deben confiar, a estos efectos, en la cobertura de la auditoría interna. En 
        la medida en que las responsabilidades de información, de tipo profesional u organizativo lo admitan, los 
        auditores internos deben realizar las revisiones de forma que permitan una coordinación y eficacia máximas de 
        la auditoría.
   4.  La auditoría interna puede acordar la realización de trabajos para los auditores externos referidos a su auditoría 
        anual de los estados financieros.  Este trabajo de apoyo a los auditores externos en el cumplimiento de su 
        responsabilidad estará de acuerdo con todos los contenidos relevantes de las Normas para el ejercicio 
        profesional de la auditoría interna.
   5.  El director de auditoría interna debe realizar evaluaciones periódicas de la coordinación entre los auditores 
        internos y los auditores externos.  Estas evaluaciones pueden incluir también evaluaciones de la eficiencia y de 
        la efectividad global de las actividades de auditoría interna y externa, incluyendo los costes totales de auditoría.
   6.  En el ejercicio de su papel de supervisión el Consejo puede solicitar al director de auditoría interna que evalúe la 
        actuación de los auditores externos.  Estas evaluaciones deben ser hechas, normalmente, en el contexto del 
        papel del director de auditoría interna como coordinador de las actividades de los auditores externos e internos y
        sólo se ampliaría a otros temas de su actuación a petición específica de la alta dirección o del Consejo.
   7.  Las evaluaciones de la actuación de los auditores externos deben estar basadas en información suficiente para 
        apoyar las conclusiones alcanzadas.  Las evaluaciones de la actuación de los auditores externos con respecto 
        a la coordinación de las actividades de los auditores internos y externos deben reflejar los criterios descritos en 
        la sección 550.02 de las Normas.
   8.  Las evaluaciones de la actuación de los auditores externos que se amplíen a temas además de la coordinación 
        con los auditores internos, pueden referirse a factores adicionales como:

              a. Conocimiento y experiencia profesionales.
              b. Conocimiento del sector de la organización.
              e. Independencia.
              d. Disponibilidad de servicios especializados.
              e. Anticipación y comprensión de las necesidades de la organización.
              f. Continuidad razonable del personal clave contratado.
              g. Mantenimiento de relaciones laborales adecuadas.
              h. Cumplimiento de compromisos contractuales.
              i. Aportación de valor añadido a la organización.

   9.  El director de auditoría interna debe comunicar los resultados de las evaluaciones de la coordinación entre los 
        auditores internos y externos a la alta dirección y al Consejo y, en caso de ser necesario, incluir cualquier 
        comentario importante sobre la actuación de los auditores externos.
  10. Los estándares profesionales de los auditores externos pueden requerirles que se aseguren que ciertos temas 
       se comunican al Consejo.  El director de auditoría interna debe comunicarse con los auditores externos con 
       respecto a estos temas para tener conocimiento de los asuntos. Entre estos pueden citarse los siguientes:

             a. Debilidades de control importantes.
             b. Errores e irregularidades.
             c. Actos legales.
             d. Criterios de la dirección y estimaciones contables.
             e. Ajustes de auditoría importantes.
             f. Desacuerdos con la dirección.
             g. Dificultades encontradas para realizar la auditoría.
 

II. La coordinación de esfuerzos implica:

  1. Reuniones periódicas para discutir asuntos de interés mutuo.
      Las actividades de auditoría planificadas para los auditores internos y externos deben ser discutidas para 
      asegurar que la cobertura de auditoría está coordinada y se minimiza la duplicidad de esfuerzos.  Se deben 
      programar las reuniones suficientes durante el proceso de la auditoría para asegurar la coordinación del trabajo, 
      la eficiencia y la finalización en tiempo de las actividades de auditoría, y para determinar si los resultados del 
      trabajo realizado hasta la fecha requieren que el alcance planificado del mismo sea modificado.

   2. Acceso mutuo a los programas de auditoría y papeles de trabajo.

El acceso a los programas y papeles de trabajo de los auditores externos puede ser importante para que los auditores internos queden satisfechos de la conveniencia de confiar, para los fines de auditoría interna, en el trabajo de los auditores externos.  Dicho acceso conlleva la responsabilidad para la auditoría interna de respetar la confidencialidad de aquellos programas y papeles de trabajo.  Igualmente, se debe permitir el acceso de los auditores externos a los programas y papeles de trabajo de los auditores internos para que los auditores externos queden satisfechos de la conveniencia de confiar, para los fines de auditoría externa, en el trabajo de los auditores internos.

  3. Intercambio de informes de auditoría y de cartas de recomendaciones a la Dirección.
             a. Los informes de auditoría interna, las respuestas de la dirección a los mismos y su seguimiento 
                 posterior por la auditoría interna deben ponerse a disposición de los auditores externos.  Estos informes 
                 les ayudan a determinar y adecuar el alcance del trabajo.
             b. Los auditores internos necesitan acceder a las cartas de recomendaciones a la dirección de los 
                 auditores externos.  Los temas tratados ayudan a la auditoría interna a planificar los futuros trabajos de 
                 auditoría en las áreas más relevantes.  Después de la revisión de dichas cartas y del inicio de cualquier 
                 acción correctiva necesaria por parte de la dirección o del Consejo, el director de auditoría interna debe 
                 asegurar que se realiza un seguimiento adecuado y se toman las medidas correctivas.

   4. Entendimiento común de las técnicas, métodos y terminología de auditoría.
             a. El director de auditoría interna debe conocer el alcance del trabajo planificado por los auditores 
                 externos y debe estar satisfecho conque dicho trabajo, en conexión con el planificado por la auditoría 
                 interna, satisface los requerimientos de la Norma 300.  Esta satisfacción requiere un entendimiento del 
                 nivel del criterio de importancia relativa utilizado por los auditores externos en su planificación y de la 
                 naturaleza y extensión de los procedimientos planificados por los auditores externos.

             b. El director de auditoría interna debe asegurar que las técnicas, métodos y terminología de los auditores 
                 externos son comprendidos suficientemente por los auditores internos y le permiten: (a) coordinar 
                 el trabajo de los auditores internos y externos, (b) evaluar, para tener confianza, el trabajo de los 
                 auditores externos y (c) asegurar que los auditores internos que han realizado trabajos para cumplir los 
                 objetivos de los auditores externos pueden comunicarse de forma eficaz con éstos.

             c. El director de auditoría interna debe proporcionar información suficiente que permita a los auditores 
                 externos entender las técnicas, métodos y terminología de los auditores internos, para facilitar la 
                 confianza de aquellos en el trabajo realizado utilizando dichas técnicas, métodos y terminología.

             d.  Podría ser más eficiente para los auditores internos y externos utilizar técnicas, métodos y 
                  terminologías similares para coordinar de forma efectiva sus trabajos y confiar cada uno en el trabajo del 
                  otro.

Función del auditor interno en relación con el auditor externo. Normas Técnicas de Auditoría del ICAC.
Así como en la normativa que hemos visto con anterioridad, sí que se explicitaba la relación entre el auditor interno y el auditor externo, en las Normas Técnicas de Auditoría del ICAC, no existe la definición de tal relación. Sin embargo, ésta se puede extraer del punto
2.4. Estudio y evaluación del Control Interno.
2.4.1.  Deberá efectuarse un estudio y evaluación adecuada del control interno como base fiable para la determinación del alcance, naturaleza y momento de realización de las pruebas a las que deberán concretarse los procedimientos de auditoría.Acto seguido, el legislador quiere distinguir lo siguiente:
2.4.2. A tal efecto es preciso distinguir entre el estudio destinado a evaluar y mejorar el sistema de control interno de una entidad, realizado por el auditor en su calidad de experto y en virtud de mandato específico, del estudio y evaluación de control interno que se realiza en el contexto de una auditoría.
Posteriormente, después de analizar temas tales como: control interno contable, alcance del estudio, revisión del sistema, pruebas de cumplimiento y su naturaleza, período y extensión, en el apartado Interrelación con otros procedimientos de auditoría punto 2.4.37 nombra por primera y única vez al auditor interno: el auditor independiente deberá considerar los procedimientos llevados a cabo por los auditores internos al determinar la naturaleza, el momento, y la extensión de sus propias pruebas. El trabajo de los auditores internos deberá ser considerado como un complemento, pero nunca como un sustitutivo de las pruebas de los auditores independientes.

Conclusiones
1. Destacar el nuevo enfoque de la auditoría interna, rompiendo con el significado del pasado y dando un mayor énfasis en la consultoría y el asesoramiento.
2. Existen diferencias entre la función del auditor interno y el auditor externo, pero también existen puntos de convergencia y cruce de ambas actividades.
3. Estos puntos de convergencia deben ser:
 - Coordinación entre auditoría interna y externa para establecer la cobertura adecuada y minimizar la duplicidad de 
   esfuerzos.
 - Reuniones periódicas para discutir asuntos de interés mutuo.
 -  Acceso mutuo a los programas de auditoría y papeles de trabajo.
 -  Intercambio de informes de auditoría y de cartas de recomendaciones a la dirección.
 -  Entendimiento común de las técnicas, métodos y terminología de auditoría.
4. El auditor independiente deberá considerar los procedimientos llevados a cabo por los auditores internos al determinar la naturaleza, el momento y la extensión de sus propias pruebas.
 

Bibliografía:

  • “Codificación de las Normas para el ejercicio profesional de la Auditoría Interna” Instituto de Auditores Internos de España.
  • "Manual de Auditoría Interna. Enfoque operativo y de gestión” Eduardo Heviá
  • “Normas Técnicas de Auditoría” (ICAC)
    • “Auditoría Interna en las organizaciones bancarias y relación entre las autoridades de supervisión y los auditores Internos y Externos” Documento consultivo sobre supervision bancaria publicado por el Comité   Basilea sobre Supervisión Bancaria

      Francisco M. Blay Alabarta
      Comisión de Auditoría
 
Ir a: Artículo Anterior Ir a: Artículo Siguiente