La
Escuela de Economía organizó el Seminario sobre “Gestión
de Tesorería y negociación bancaria” que fue impartido por
Antonio Aynat, economista consultor de empresas. Con este artículo
se pretende explicar de manera resumida los aspectos más destacados
de la Gestión de la Tesorería en la empresa, con principios,
funciones y herramientas financieras necesarias para la realización
de una correcta toma de decisiones. Así como la necesidad de implantar
una negociación por objetivos con las Entidades financieras analizando
las distintas fases del proceso.
El Cash-Flow
y el proceso de toma de decisiones
La tesorería es un
proceso que analiza previsiones de futuro con relación a los cobros
y los pagos de la empresa, a diferencia de la contabilidad, que analiza
los datos pasados confeccionando así un histórico de los
acontecimientos ocurridos. De esta manera se está trabajando en
un entorno de total certidumbre, mientras que la gestión de tesorería
carece de esta certeza requiriendo constantemente de información
para poder realizar la toma de decisiones de futuro.
La herramienta imprescindible
para la gestión de tesorería y poder elaborar las previsiones
de tesorería es el Cash-Flow.
El Cash-Flow
se puede entender como Flujo Neto de Tesorería, añadiendo
a los saldos iniciales de tesorería los cobros del periodo y restándole
los pagos del periodo.
CF = So + ? Cobros-
? Pagos
Así, el CF
nos mide, con independencia del resultado del periodo, las necesidades
de financiación si fuera negativo o las posibilidades de Inversión
si fuera positivo que tendría la empresa.
Analizando el Cash-Flow
obtendremos un resultado, ya sea positivo o negativo, que será el
llamado Cash-Flow antes de decisiones (CFAD), y será entonces cuando
tendremos que realizar la toma de decisiones, de Invertir si es positivo
o Financiar si es negativo.
En caso de déficit
en el CFAD habrá que buscar los mecanismos para conseguir dinero
y cubrir esos pagos que vendrán próximamente, contando con
lo que disponemos o dispondremos en un futuro a corto plazo.
En el proceso de toma de
decisiones, las variables a controlar son Volumen (en cuanto a capitales
y plazo) y Precio (en cuanto a intereses y gastos).
Financiación ajena:
- Prestamos a C.P.:
Son cantidades fijas a un plazo fijo.
- Descuento Bancario:
Podríamos decir que es tipo préstamo, en el sentido que llevamos
al descuento un efecto con cantidad fija y a vencimiento fijo, aunque
el coste sea en el momento de descontar.
- Póliza de Crédito:
Son de utilización variable tanto en importe como en plazo,
siendo el coste en función del capital dispuesto. Por tanto, esta
modalidad es más adaptable a las necesidades concretas.
El proceso de toma de decisiones
consiste en estudiar los distintos casos o posibilidades que se puedan
plantear y CUANTIFICAR. Hay que realizar los cálculos
de los costes que supongan cada opción y no desechar ninguna a priori
por extraña que parezca, además hay que hacer los cálculos
en valores absolutos (en pesetas) y no en valores relativos (en porcentajes),
para hacer comparables las diferentes opciones.
Así mismo es
muy importante el conocer el importe y el plazo, es decir, las necesidades
reales de financiación (incluso más importante que el coste),
para intentar evitar una SOBREFINANCIACIÓN. (Financiación
por un plazo superior al necesario).
Por ejemplo, quizá
sea mejor NO descontar efectos a noventa días con una TAE del 4.5
%, y estar en descubierto aunque sea al 26% si solo se va a estar un día,
puesto que con el descuento tendríamos una sobrefinanciación
durante 90 días.
Por tanto, como ya
se ha dicho, el tesorero deberá siempre cuantificar para proceder
a la toma de decisiones.
Con todas estas decisiones
de financiación y de Inversión según las necesidades
vistas en la curva de CFAD, llegamos a la Máxima del Cash-Flow,
que sería:
Cash-Flow de Explotación
como sumatorio de todas las posiciones de Tesorería. Es decir, la
suma de los saldos de las cuentas de tesorería menos los riesgos
o posiciones de financiación e Inversión a C.P., y este Cash-Flow
acumulado ya será inamovible e indica el volumen optimo de financiación
o inversión de la empresa.
? Principios de la gestión
de Tesorería
1. Tesorería en Fecha-Valor.
En las entidades financieras
están definidas dos fechas, como son:
- Fecha de la operación,
de contabilización física de las operaciones. Tal y como
vienen reflejadas en los extractos.
- Fecha valor, la
que sirve de base para el cálculo y liquidación de los intereses
de las cuentas.
Aparece la circular 8/90
del Banco de España sobre transparencia de las operaciones bancarias
y protección a la clientela. Es la norma que regula las relaciones
Banco-Empresa y donde se definen las valoraciones de las diferentes operaciones
bancarias.
Hay que tener mucho cuidado
con los saldos en fecha valor, que pueden diferir e incluso reflejar situaciones
contrarias con los saldos en fecha de operación. Por tanto en tesorería
hay que procurar trabajar en Fecha-Valor que permite conocer la posición
real y permite actuar en consecuencia.
2. Control y Negociación
de las Condiciones Bancarias.
A través de la banca
pasan la mayoría de cobros y pagos, inversiones y financiaciones
de la empresa, por lo tanto, de la misma manera que se controlan
las relaciones entre empresa y proveedores o clientes, hay que controlar
también a los bancos para que cumplan las condiciones pactadas.
El control reduce el gasto.
Así mismo, hay que
negociar con cada banco todas y cada una de las condiciones de los productos
o servicios que ofrece el banco. No solo negociar los puntos de interés
sino todos los Factores principales de Coste, que son:
- Intereses. En función
del tiempo, el capital y el interés.
- Comisiones. En función
del volumen y no del tiempo.
- Valoraciones. Es el coste
de no disponer de los fondos en el momento.
- Servicios. Es el trato
personal, comunicaciones, dif. de cambio, etc.
- Otros factores de coste:
- Operaciones vinculadas.
Son el coste de impagados, etc.
- Restricciones. Son limitaciones
en volumen impuestas por el banco.
Hay que analizarlo todo,
incluso estos últimos costes que no repercuten directamente en nuestra
cuenta de resultados pero que sí pueden suponer un beneficio potencial
al emplearlo adecuadamente.
3. Gestión del Riesgo.
Hemos de intentar eliminar
cualquier tipo de riesgo.
- Riesgo por diferencias
en tipos de cambio.
- Riesgo por variaciones
en tipos de interés.
Hay que evitar la especulación,
no debemos dejar que cualquier cosa futura que desconocemos le afecte a
nuestra empresa. Hay que tomar medidas para eliminar la exposición
al riesgo, ya que no hacer nada también es una especulación
pasiva.
Por lo tanto, hay que analizar
que variantes del riesgo nos afectarán y en que medida, ver
la política de cobertura a utilizar y analizar también
el coste de esta política de cobertura.
4. Gestión de Tesorería
Previsional.
Se trata del principio fundamental
de toda gestión de tesorería, el de previsión.
Es pues una gestión
sobre las posiciones futuras de la empresa, donde se deben traducir a números
las políticas de la empresa y donde la herramienta básica
para el tesorero es el CF antes de decisiones.
El tesorero deberá
prever si los proyectos de la empresa tienen viabilidad financiera
futura o no, es decir, que un proyecto puede muy bueno, pero si no se puede
conseguir la financiación necesaria para llevarlo a cabo, el proyecto
será inviable y no se podrá realizar por muchos beneficios
que de a largo plazo.
Por todo ello y siguiendo
estos principios, las Funciones del Tesorero son:
- Prever y gestionar los
flujos monetarios de la empresa
- Negociar y controlar las
operaciones bancarias.
- Anticipar y cubrir los
riesgos de la empresa.
- Optimizar la gestión
del disponible, asegurando la solvencia y liquidez de la empresa.
? El Autodiagnostico Financiero
El Autodiagnóstico
es un método de calculo que nos mide el nivel de eficacia en nuestra
gestión de tesorería. Nos dará el sobrecoste
ocasionado por la incorrecta gestión de tesorería producida,
calculando el error y la distribución de los saldos diarios, es
decir, a corto plazo.
El cálculo se realiza
restando los costes de la situación real menos los costes
que produciría la situación optima. Siendo esta situación
optima el resultado de distribuir los saldos a las cuentas con mejores
condiciones.
El autodiagnóstico
es uno de los informes importantes y necesarios que hay que realizar, aunque
sea de la manera más sencilla posible (método simple), y
después, en función de los resultados obtenidos, se realiza
un análisis con mas exactitud y profundidad.
En economía
es preferible tener un mal dato antes que no tener ninguno.
? La Negociación Bancaria
por Objetivos
La PREPARACION
es el éxito del proceso de negociación.
Antes de cualquier proceso
de negociación hay que prepararse y después evaluar el resultado,
adoptar una nueva estrategia y volverse a preparar para una nueva negociación.
Fases del Proceso de
Negociación:
1. Fijarse los objetivos
de la gestión financiera.
Siempre hemos de tener presente
que el objetivo principal, el más importante de todas las empresas
será de ASEGURAR LA LIQUIDEZ de la empresa. Una vez conseguido eso,
el financiero deberá también como segundo objetivo el Maximizar
el Resultado Financiero. Posteriormente también se deberán
fijar otros objetivos ya de índole administrativo y organizativo.
2. Análisis de las
Necesidades.
Hay que conocer el volumen
de negocio, tipos de operaciones, plazos, siendo el Cash-Flow de explotación
previsional quien nos proporciona la información.
3. Valoración de la
relación histórica.
Veremos entonces si anteriormente
se han cumplido las condiciones pactados, el trato administrativo
recibido, el apoyo recibido en momentos difíciles, etc...
4. Análisis de la
Capacidad de Negociación.
Hemos de ser conscientes
de nuestras limitaciones frente a la Banca, en cuanto a nuestra solvencia,
garantías, contraprestaciones cedidas, volumen de negocio, etc.
Hemos de conocer nuestra capacidad de endeudamiento y saber hasta donde
estamos dispuestos a asumir riesgos con relación a nuestras garantías.
Asimismo hemos de transmitir a la Banca credibilidad y profesionalidad.
Con todo, no hemos de limitarnos
a la hora de negociar, puesto que todo puede ser susceptible de negociación.
5. Cuantificación.
El tesorero ha de calcular
el coste de su relación con los bancos y de todas las posibles alternativas.
Para ello necesitamos tener una Ficha de Condiciones de cada banco donde
tengamos desglosados los costes de cada producto o servicio bancario (Intereses,
Comisiones, Valoraciones, Servicios y Operaciones Vinculadas, Restricciones
y otras informaciones).
Seguidamente se realiza un
análisis de los datos que tenemos de las operaciones reales realizadas
con cada banco, utilizando la hoja de cálculo (Excel es la herramienta
más importante para el financiero). Calcularemos en términos
absolutos el coste que nos supone cada banco para poder compararlos entre
sí. Para ello, valoraremos el volumen utilizado en cada operación
(financiación, transferencias de extranjeros,...) con los costes
de cada operación (interés, comisión, valoración,
...). Obtendremos así un total por cada banco que nos servirá
para hacer una primera comparación. Pero esto no nos debe llevar
a conclusiones, sino que solo nos da una primera idea.
Podemos utilizar el método
tradicional de valoración que intenta medir el negocio que hace
el banco con nuestra empresa. Ratio BBE (Balance Banco Empresa).
Ingreso Total Banco
BBE = ------------------------------
Crédito Neto
Con éste Ratio se
ve lo que cada Banco gana con la empresa con relación al crédito
que nos hacen. Pero este método tiene los inconvenientes de que
hace el análisis desde el punto de vista bancario y no de la empresa,
también que el ratio está utilizado en función del
crédito neto, limitando así otro tipo de relaciones Banco-Empresa.
La utilización de
este método puede inducir a decisiones equivocadas.
Por ello, existe un nuevo
método para la cuantificación en la negociación bancaria:
La TAYA BANCARIA.
Calculamos la distribución
óptima con los datos tal y como debíamos haberlos distribuido,
utilizando las cantidades adecuadas a cada producto con los costes que
actualmente se tienen. Calcularemos así el Resultado Optimo, que
seguramente será mejor que el real. La diferencia será nuestro
error de distribución. Este error no es achacable al banco, sino
a nuestra gestión, por lo tanto hemos de eliminarlo del proceso
de negociación.
Calcularemos entonces el
Resultado Mínimo, que será nuestro objetivo en la negociación,
se realizará calculando para cada banco el coste soportado utilizando
la distribución optima de los importes con las condiciones objetivo
(que pueden ser las mínimas o mejores entre todos los bancos de
la empresa.
La TAYA Bancaria es pues,
la diferencia obtenida entre el resultado optimo y el resultado mínimo.
Será entonces el beneficio potencial a alcanzar en el proceso de
negociación bancaria.
RDO. REAL
? Error de Distribución
RDO.OPTIMO
? Taya o Bcio.Potencial de Negociación
RDO.MINIMO
Comparando componente a componente
entre la tabla óptima y la mínima, nos daremos cuenta de
qué factores de coste nos afectan mas y hacia donde debemos dirigir
nuestra negociación. Solicitar reducción de comisiones, o
solicitar reducción de la restricción de volumen, proponer
un aumento en el volumen de negocio a cambio de reducir comisiones, buscar
otros bancos, etc. ...
? La Organización
Administrativa.
Tradicionalmente se considera
a la tesorería como una parte de la contabilidad (contabilidad de
bancos). En este sistema tradicional se considera la Contabilidad como
el centro de la estructura departamental de la empresa.
Pero esta tiene dos problemas:
- Los bancos no nos dan
información completa ni instantánea
- No se recibe la información
de la propia empresa, quedando ésta en departamentos anteriores
(normalmente en contabilidad).
La solución al primer
problema sería informatizar el sistema, unir la información
bancaria directamente con la empresa. Y que el sistema tenga las fichas
de condiciones de los bancos de modo que pudiéramos adelantarnos
a los datos que nos proporcione el banco, eliminando así el paso
de tener que esperar a recibir la información del banco. Así,
la Conciliación, no solo nos servirá para hacer coincidir
los saldos sino que también nos servirá para controlarlos.
Para solucionar el segundo problema sería trasladar el control lo
antes posible en la estructura departamental de la empresa, y que la información
pasara directamente al resto de departamentos. Lo ideal sería trasladarlo
al presupuesto, ya que un gasto, si no estuviera presupuestado ni
siquiera se formularía el pedido y no se produciría dicho
gasto. El gasto se controla mucho antes de que se pague. En caso de que
se quiera comprar más de lo presupuestado sería decisión
de Dirección. |