Número 187
- 2ª Quincena Julio 2000.
http://www.cocotero.comDiccionario de sinónimos, que se puede consultar en cualquier momento para enriquecer nuestro vocabulario. Se trata de un proveedor de servicios y contenidos, que ofrece la oportunidad de consultar un diccionario a través de una simple orden de búsqueda desde el teléfono móvil. Además ofrece información completa de áreas como las finanzas, ocio y entretenimiento.
Página de la Diputación de Valencia, que pone a disposición del usuario toda la información turística de los municipios de la provincia, así como las actividades y proyectos que desarrolla Valencia. Se encuentran representados los municipios de Llutxent, Montesa Genovés, Anna, Bocairent, Ontinyent, Canals, Xàtiva y Vallada, junto a otros.
Información financiera sobre los mercados bursátiles. Ofrece un análisis diario de la situación del mercado, un buscador de fondos de inversión, un consultorio fiscal, manual de finanzas personales, así como un minimaster en finanzas. Además, puede encontrarse una sección de noticias sobre economía, empresas y finanzas. Subasfot es un servicio en Internet, a través del cual podrá estar diariamente informado de las subastas que se realizan en el Estado Español, tanto en Juzgados, como en Seguridad Social, Hacienda, Notarías, etc. Asimismo ponen a disposición de los interesados un amplio fichero de deudores: empresas y personas que han sufrido algún embargo.
LA BANCA IMPULSA SU PRESENCIA EN INTERNET
Los bancos centran sus estrategias de expansión hacia Internet, donde recientemente se han producido grandes operaciones de posicionamiento. Según un estudio de Andersen Consulting, España cuenta en la actualidad con 664.000 clientes de banca electrónica. Una cifra que se habrá triplicado dentro de tres años, si se cumplen todas las previsiones.
El nacimiento de Uno-e, el banco por Internet del BBVA, reconoce en la banca a una consumidora avanzada y preferente de sistemas de información. Un nivel de utilización de las nuevas tecnologías que con el paso del tiempo se ha ido equilibrando en los restantes sectores de actividad.
Es evidente que la banca española no quiere perder tiempo en lo que se ha definido como nueva etapa e-business, multiplicándose acuerdos, asociaciones y joint-ventures entre entidades financieras y compañías tecnológicas; sin olvidar el papel de locomotora que desean tener Bankinter y BBVA con sus e-entidades.
No hay duda de que el mundo financiero se ha tomado Internet en serio, puede que no tanto por mejorar los servicios a sus clientes, ganar en fidelidad y abrir mercados, sino por el pánico a la competencia de empresas ajenas al mundo financiero.Una de las principales causas de esta apuesta, apuntada por la consultora Deloitte Research ha sido la potencialidad de los llamados supermercados financieros, tras los que se encuentra una nueva generación de compañías intermediarias entre clientes y bancos, que distribuyen productos de diferentes entidades y que, como canal indirecto, amenazan con tomar el control relegando a la banca a meros proveedores.
Desde el plano del banco tradicional, esta situación adquiere tintes de supervivencia y está impulsando la aparición, tanto de nuevos bancos virtuales, como de mejores, más elaborados y atractivos servicios y productos sólo para internautas. Se trata de la colonización de un canal, de un espacio y de un mercado por parte de la banca en la que la colaboración y las alianzas serán moneda habitual. Como ejemplo tenemos la firmada recientemente entre el BBVA y Telefónica, primer caso en el mundo en el que una operadora y un banco unen fuerzas para competir en Internet; sin olvidar al banco Popular con Lycos –el portal contará con la primera sucursal virtual del Popular-, o al BSCH que ha constituido con AT Kearney, una compañía destinada a crear mercados digitales B2B.
Ante tal volumen de movimientos y propuestas estratégicas, parece que ha llegado el momento de preguntarse por la reacción de la clientela que, al menos en teoría, debería caer en la tentación de las mejores condiciones que se dan en Internet. Hoy por hoy, la mayoría de las personas que han comenzado a operar sus cuentas a través de la red han decidido utilizar los servicios virtuales de su propio banco. Esto demuestra que, por el momento, las agresivas promociones que algunas entidades financieras on line han llevado a cabo, como Uno-e o “e-bankinter”, no han conseguido convencer de forma contundente a los clientes tradicionales de banca.
Es cierto, que algunos se han decidido a contratar los competitivos productos de estos nuevos jugadores del panorama financiero, pero, muy pocos han dejado su banco de siempre y han trasladado los ahorros de toda la vida a estas entidades electrónicas.