Número 166 - 2ª Quincena Julio 1999.
 
 
 

 "LA UNION EUROPEA PROTEGERA EL TITULO DE ASESOR FISCAL HACIA EL AÑO 2000"


 



 
Leopoldo Pons: "La Unión Europea protegerá el título de asesor fiscal hacia el año 2000"

La conferencia de clausura del XV Master en Tributación la inició el ponente, Leopoldo Pons, haciendo una observación de  que su discurso estaba pensado en términos de un economista, ya que éste es su campo natural de referencia y sería poco lógico analizarlo desde otros puntos de vista. Afirmó por su parte, que el ejercicio de la asesoría fiscal es uno de los campos más polémicos y que merecen por tanto, una reflexión previa. 

Comenzó su dilatada y bien trazada exposición haciendo un recorrido por la historia de los impuestos y afirmando que siempre han estado ideologizados. "Los impuestos han tenido una historia dentro de las haciendas públicas modernas extremadamente moralizante, cuando no ideologizada. La primera figura de la imposición personal que aparece como tal a mediados del S. XIX viene de la mano de una recomendación de J. S. Mill respecto a las herencias que estaban consideradas como algo indeseable, dado que potenciaba las desigualdades. Mill pensaba que este impuesto sobre sucesiones era un acto de necesidad social y por lo tanto tenía un componente moral." 

 

“La actividad de los asesores fiscales es fundamental para la defensa constitucional”

"Los economistas - prosiguió el ponente - siguen analizando la figura de los impuestos desde una perspectiva racional, y encuentran un componente ideológico fortísimo puesto que redistribuían y eran eficientes desde la óptica de la recaudación. Después de la II Guerra Mundial y con la guerra fría los impuestos aparecen como legitimadores del sistema capitalista, en especial el impuesto sobre la renta de las personas físicas. En el mundo anglosajón ven aparecer durante la década de los cuarenta y los cincuenta un impuesto sobre la renta fuertemente progresivo en cuanto a las tarifas que era capaz de corregir lo que no podía el mercado en sus situaciones de injusticia social. Lo que había que encontrar era el equilibrio de ese impuesto que tenía un carácter claramente moral."

El ponente continuó su exposición afirmando que "en los años sesenta ya no se habla solamente del impuesto sobre la renta de las personas físicas, sino que se habla de un modelo tributario ideal; la Unión Europea encuentra un sistema tributario prácticamente paradigmático. Había que buscar un impuesto sobre la renta de las personas físicas fuertemente progresivo, un impuesto sobre el valor añadido con fuertes capacidades de recaudación para sufragar una parte del gasto público necesario  e introducir determinados impuestos indirectos de carácter especial que frenaran consumos indeseables como el alcohol y los tabacos o que internalizaran costes como las gasolinas o la contaminación. Dentro de la imposición indirecta había que seguir manteniendo un impuesto sobre sucesiones que corrigiese las acumulaciones de riqueza y por tanto las desigualdades que se produce en segundas o terceras generaciones y había que poner un impuesto de acomodo, el de sociedades, por una serie de razones técnicas. El modelo fue aceptado prácticamente por unanimidad por parte de todos los países". 

"En España, a partir de la transición hacia la democracia nos encontramos con que la reforma tributaria de 1977 se acepta como modelo indiscutible. La reforma fiscal se plantea, sin duda, con un componente ideológico fortísimo. A partir de los años ochenta la hacienda pública sufre la revolución de los ordenadores y crece en recursos humanos, en calidad y en medios ".

El miembro del Consejo Directivo de la Confederación Fiscal Europea manifestó igualmente que los impuestos se comportan de una manera técnica y no atienden a exposiciones morales. También dijo que los hacen los técnicos porque no atienden a colectivos, sino a individuos, lo que resulta extremadamente complejo.

 

“ Los impuestos han tenido una historia extremadamente moralizante”


Leopoldo Pons afirmó que la figura del asesor fiscal no sólo existe porque los impuestos son una materia compleja y necesitan de un asesoramiento, sino porque estamos inmersos en una sociedad democrática donde la defensa del individuo es materia de primer orden. "El individuo es, para un economista, un consumidor, y el asesoramiento fiscal se legitima para proteger al consumidor, que es el que paga los impuestos". Por ello, Leopoldo Pons siguió afirmando que esa actividad profesional es fundamental para la defensa constitucional.

Quién debe realizar el asesoramiento fiscal ha sido siempre un tema controvertido. Leopoldo Pons afirmó que "desde luego, deben ser los economistas y abogados los que desarrollen correctamente esta materia. Además, a la figura de asesor fiscal se le está pidiendo práctica, conocimientos, habilidad e intuición, por lo que el ejercicio lo debe realizar alguien que cumpla  con estas premisas y pueda realmente defender al consumidor".

En cuanto al análisis del borrador de la Directiva que pretende regular la actividad profesional del asesor fiscal, Leopoldo Pons afirmó que la protección del título probablemente estará aprobada hacia el año 2000. Manifestó también que "es imprescindible tener una base de lo que es el ejercicio del asesoramiento fiscal, por lo que la formación académica previa es imprescindible". Otro de los grandes objetivos de este borrador que se convertirá en directiva, es facilitar las relaciones profesionales entre los estados miembros de la Unión Europea.

La clausura del acto corrió a cargo de Vicente Rambla, Delegado Especial de la AEAT en Valencia, quien alabó la gran calidad del profesorado del Master en Tributación que realiza el COEV y puso a disposición de los recién diplomados los servicios de apoyo a los profesionales que la Agencia Tributaria tiene establecidos y que se ampliarán en un futuro próximo.
 

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