Número 175 - 2ª Quincena Enero 2000.

ANALISIS DE UN PROYECTO EMPRESARIAL
Análisis de un proyecto empresarial
(*) Raquel Benavides Espinosa

Para desarrollar planes a largo plazo, es necesario disponer y aplicar un método de cálculo que partiendo de unas variables determinadas, llegue a proporcionar la información que sirva de base a la toma de decisiones o en su caso permita mediante la modificación de las variables iniciales recalcular dicha información. El motivo de este artículo es dar a conocer una herramienta para llevar a cabo un plan provisional del proyecto que la empresa quiere poner en funcionamiento, y   recoge uno de los temas estudiados en el curso impartido por Salvador Vercher Bellver, economista  consultor de empresas,  sobre “El plan estratégico económico – financiero".

  Al  llevar a cabo un proyecto empresarial  requeriremos  inversiones, que en la mayoría de los casos necesitarán de  recursos económicos para financiarlo. Por ello es necesario realizar la planificación estratégica económico-financiera de la empresa.

  Esta planificación será imprescindible como herramienta necesaria para garantizar la viabilidad del  proyecto, desde las perspectivas de la rentabilidad y la adecuación de los recursos a la inversión.

  En este artículo desarrollaremos, los principales puntos  necesarios para abordar la  planificación del proyecto donde presentamos un modelo que  nos permitirá anticipar en un horizonte a largo plazo, las cuentas de resultados, los estados de tesorería  y los balances de cada uno de los años que planifiquemos.

  Con este plan estratégico podremos resolver todas las dudas que se nos plantean, así como responder a las numerosas peticiones de información que nos pedirán para aprobar y poner en funcionamiento el nuevo proyecto de inversión. Podremos contestar a dichas peticiones con el rigor adecuado, sobre la base de unos datos provisionales fiables.

Desarrollo del plan estratégico.

  La elaboración de este, requiere un análisis pormenorizado de variables de carácter interno (procesos internos,  formación, captación, motivación del personal, productos, sistemas de información, costes, rentabilidad, situación financiera, gestión de calidad, servicio al cliente) y de carácter externo (mercado, posición competitiva) que permitan a la dirección elegir el conjunto de políticas más idóneas  para conseguir que la empresa alcance la posición competitiva deseada.

  Deduciremos una serie de debilidades y fortalezas de las empresas y analizaremos las amenazas y oportunidades  del entorno.

   La actuación debe ir orientada a reducir al máximo las debilidades y  potenciar las fortalezas.

  El primer paso debe ser definir claramente la actividad, segmento de clientes, ámbito geográfico, valores de organización, nivel de calidad y servicio, estrategia básica (liderazgo en costes, diferenciación de oferta); a partir de aquí acometeremos la política comercial, de está se derivará el resto de políticas, las cuales condicionaran las variables económicas de ingresos, costes, rentabilidad necesarias y a su vez la política financiera.

  Analizaremos el mercado  realizando una prospección del mismo, estudiando la oferta, es decir los competidores, su posicionamiento en el mercado e investigando la demanda porque debe conocer las características de sus clientes, identificándolos, conociendo sus preferencias, necesidades y hábitos de consumo. Estas variables serán determinantes para conocer la cuota de mercado objetivo. Esta cuota será la que la empresa se fije como objetivo, la cual orientara su política comercial a desarrollar y de la que  deducirá el volumen de negocio necesario.

  Este   plan estratégico debe materializase a través de un modelo de planificación que permita cuantificar los resultados esperados.

  Dicho modelo  se convertirá en un simulador instantáneo de los resultados esperados, lo elaboraremos básicamente mediante cuadros.
 

Gestión del capital circulante necesario.

  Si en una organización el  capital circulante necesario (C.C.N) es positivo, constituirá una inversión que debemos financiar con recursos permanentes, ahora bien, si es negativo constituirá una fuente de financiación con la que podremos financiar el inmovilizado sin que la empresa se encuentre en desequilibrio. De lo cual se deduce que cuanto menor sea el capital circulante necesario, menor financiación necesita la empresa para lograr el equilibrio financiero. 

  El  capital circulante necesario, como vemos, es un elemento básico para establecer las necesidades financieras de la empresa.

  Así también las necesidades evolucionan  a lo largo del tiempo, un crecimiento rápido del volumen cuando el periodo de maduración es positivo hará que las necesidades de capital circulante necesario se incrementen. Una adquisición de inmovilizado sin una financiación a largo plazo supone una necesidad de capital circulante; en este sentido, una necesidad de capital circulante es una necesidad de recursos permanentes.
 

Inversiones y su financiación.

 Será necesario elaborar un presupuesto de inversiones (P.I.) el cual debe contemplar las distintas partidas e importes previstos a invertir. Junto a este deberemos establecer el plan de amortización basado en criterios económicos y nunca fiscales. Realizaremos así pues un cuadro de amortizaciones junto con el cuadro de inversiones.
Una vez establecido el capital circulante necesario y el plan de inversiones podremos determinar las necesidades de recursos permanentes.
 
 

Necesidades de R. Permanentes = P.I. + C.C.N.

  Establecido dicho plan de necesidades de recursos permanentes deberemos establecer el plan de financiación que deberá contemplar los fondos propios (importe de los mismos y fecha de aportación) y los fondos  ajenos a largo plazo (importe, fecha de constitución de los créditos, plan de amortización, tipo de interés, años de carencia, etcétera.).

  Esto tendrá un impacto directo en la tesorería, en el capital circulante real y a través de este conseguimos el esperado equilibrio financiero, a la vez que la amortización de estos recursos incidirán en la tesorería y los intereses  a su vez en la cuenta de resultados.
 

Modelo económico.

  Estamos pues en condiciones de realizar los presupuestos de ingresos y gastos o presupuestos de operaciones. Estos presupuestos constituirán los objetivos cuantificados en el tiempo que se espera conseguir a través del conjunto de políticas (comercial, fabricación, aprovisionamiento, etcétera) cuya aplicación constituirá la estrategia de negocio de la empresa.

  Desarrollaremos a continuación el  modelo económico a aplicar:
 

+ Ventas netas
- Coste de ventas
 
= Margen comercial
- Costes variables
 
= Margen de contribución
- Cargas de estructura y financieras
= Resultados
 

 
  • Ventas netas: Cifra de negocio total, neto de IVA. y devoluciones de venta.
  • Coste de ventas: Para empresas comerciales el coste de aprovisionamiento de la mercancía vendida y para empresas industriales es el coste industrial de ventas. 
  • Margen bruto: (Para empresas industriales Margen industrial).
  • Importante a destacar que el margen se aplica sobre la cifra de ventas y no sobre el coste de ventas como muchos empresarios erróneamente realizan.
  • Costes de comercialización: En estos incluimos los costes relacionados con el sostenimiento del cliente y la gestión comercial.
  • Margen comercial.
  • Otros costes variables: Costes relacionados con las secciones funcionales, que están al servicio de las secciones comerciales y que además tienen un comportamiento variable respecto de las ventas.
  • Margen de contribución.
  • Cargas de estructura y financieras: Cargas de estructura son aquellos costes no imputables a los productos, constituyen costes del periodo y no de la actividad. No formando parte por tanto de la valoración de los stocks y repercutirán en los resultados de la empresa en el momento que se produzcan dichos costes. En las empresas industriales incluiremos los costes de subactividad y que previamente se habrán identificado y cuantificado. Incluirlos en el coste de los productos significaría una alteración de los costes de fabricación. 

  •   Las cargas financieras son costes de la estructura financiera, (los ingresos financieros se suelen tratar como menos costes).
  • Resultados: Donde ya estaremos en condiciones de elaborar de acuerdo con este modelo las cuentas provisionales de resultados para todo el horizonte económico objeto de previsión.

Presupuesto de tesorería
.
  Aplicando los plazos previstos de cobro y pago, el modelo determina los distintos flujos de tesorería, o cash-flow financiero:

  • C.F.  Explotación.
  • C.F.  Operaciones financieras.
  • C.F.  Estructural.


  Habiendo confeccionado  como hemos visto:

  • El plan de inversiones.
  • El plan de financiación.
  • El presupuesto de operaciones.
  • El presupuesto de tesorería.


  El modelo desarrollará los balances provisionales.
 

Diagnóstico económico financiero.

  A través de la metodología expuesta hemos confeccionado:

  • Resultados provisionales.
  • Presupuesto de tesorería.
  • Balances provisionales.
  Con todo ello disponemos de los documentos necesarios para desarrollar el diagnostico económico financiero de la empresa a través de los distintos ratios económico-financieros, así como el: 
 

Cuadro de financiación.

  Donde perseguimos como objetivo poner de manifiesto los recursos generados por la empresa así como su empleo en partidas de fijo o circulante con objeto de comprobar si la evolución de dichas magnitudes empresariales es equilibrada o no.

  Si la empresa es generadora de recursos lo lógico es que con el transcurso del tiempo estos recursos obtenidos se materializan en ausencia de inversiones o distribución de beneficios en incrementos de capital circulante. En caso contrario se producirán disminuciones de capital circulante. Estos excesos o necesidades de capital circulante tendremos que gestionarlos para mantener el equilibrio financiero.

  El Cash Flow Económico es el flujo aparente originado como consecuencia de las operaciones de la empresa por lo que viene determinado por los resultados obtenidos, incrementado en aquellos conceptos de gastos que no originan pagos como por ejemplo las amortizaciones. 

  El Cash Flow Financiero en cambio es el flujo de caja real y viene determinado por la diferencia en la tesorería de un periodo y el anterior.

  Esa diferencia se explica a través del análisis del resto de partidas puestas de manifiesto en el cuadro de financiación, pudiéndose descomponer sus causas  en:

  •  Desfase de la explotación, desfase financiero, desfase estructural.


Conclusiones.

  Toda la información anterior nos debe permitir extraer las conclusiones adecuadas y deducir:

  • La viabilidad ó 
  • La inviabilidad del proyecto empresarial.
  Y por tanto aprobar o variar el mismo.
  Son pues estos planes estratégicos los que se utilizan en los órganos superiores de decisión de la empresa para la toma de decisiones estratégicas de la empresa. De esta forma el conjunto de políticas comercial, producción, aprovisionamiento, recursos humanos, Inversión, Financiación, plasmadas y cuantificadas numéricamente en el plan son las que configuran la estrategia económica financiera de la empresa una vez aprobado el plan estratégico.

Colegiada nº  6.302
 

 

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