Es de todos conocido
que la semana bajista del 10 al 15 de abril se culminó con un importante
descenso en Wall Street (el 5,9%). En el hecho en sí habían
concurrido dos factores: el pesimismo sobre la sostenibilidad de las valoraciones
de las empresas tecnológicas y el mal dato de inflación USA
que ponía en duda lo que se ha dado en llamar nuevo paradigma al
permitir el crecimiento constante sin inflación.
Distingamos, lo que es un
crash, o lo que simplemente se trata de una corrección, y dispongamos
así de las luces necesarias para saber dónde nos encontramos
ahora, al menos, de momento.
En los últimos 20
años, hemos vivido 2 crash en las bolsas mundiales. El primero de
ellos ocurrió en octubre de 1987. El índice Dow Jones estaba
situado entonces en los 2.500 puntos y nuestro Ibex-35 se encontraba en
3.400. En mes y medio, el Dow Jones se colocó en 1.750 y el Ibex-35
en 2.200. Supusieron caídas del 30% y 35%, respectivamente. El segundo
tuvo lugar en el verano del 90 (guerra del Golfo). En su inicio, tanto
el Dow como el Ibex marcaban 2.900 puntos. Pérdidas, pues, del 17%
y 31%.
Desde ese período
ha habido varias correcciones importantes: crisis asiática de octubre
del 97, crisis financiera internacional del verano del 98 y, por último,
el tercer susto, aunque de manera más técnica vamos a llamarle
corrección, se está produciendo en estos días. Comenzó
en marzo y su denominación es crisis tecnológica. Se han
sufrido descensos hasta hoy del 14% y 10% en uno y otro índice.
Partíamos de los siguientes valores: Ibex: 12.968, Dow: 11.750.
¿Recuerdan los 3.400 y 2.500 respectivos de cuando ocurrió
el primer crash, 1987, aquí comentado?.
La conclusión sería
que entre los crash y las correcciones hay un largo espacio y la Bolsa
(mejor mediante Fondos por la diversificación) es en el tiempo,
no en el momento, con gran diferencia, la mejor opción inversora
a pesar de las volatilidades del mercado. Volatilidades con las que hay
que contar siempre. Aún diré más: es la única
forma de multiplicar, en períodos largos, el patrimonio en varias
veces.